En días pasados se conoció la noticia del hallazgo por la Armada Nacional de dos delfines rosados o toninas muertas en inmediaciones del río Cravo Sur que desemboca en el río Meta. Según las primeras versiones esta situación se debe a que los pescadores ilegales por medio de redes atrapan a las toninas arponeándolas para extraerles el aceite utilizado como remedio para males respiratorios, lociones para atraer mujeres, carnada y otros productos derivados.
El comandante del puesto fluvial de Orocué, Andrés Ladino informa que de cada tonina se pueden extraer entre 100 y 150 botellas de aceite que pueden comercializarse a $50 mil por unidad en el mercado negro.
Los pescadores que atentaron contra estos animales en vía de extinción podrían enfrentarse a sanciones ambientales, incluso recibir 8 años de prisión por incurrir en el uso ilegal de los recursos naturales afirmó Ladino.
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